¿Qué debes saber si vas a ser aval de alguien que renta casa?

23/junio/2021

Agencias

¿Un amigo, conocido o familiar está por rentar un inmueble y te pidió ser su fiador? Antes de tomar la decisión, es importante que sepas las responsabilidades que esto conlleva.

Expertos del sitio inmobiliario Propiedades.com, comparten los detalles en los que nos debemos fijar, antes de ser fiadores.

Qué hace un fiador: Karla Cruz González, abogada especialista en asuntos Financieros e Inmobiliarios, y Arturo Rodríguez Habeica, socio del despacho BRRH Abogados, indican que como fiador te comprometes a garantizar el cumplimiento de cada una de las obligaciones contraídas por el arrendatario. Entre ellas, el pago oportuno de la renta.

De acuerdo con los expertos, la manera de respaldar estas obligaciones es a través de un bien inmueble (libre de gravamen) que dejas en garantía. Así como la firma de un contrato de arrendamiento.

No obstante, detallan que como fiador no puedes ser obligado a pagar sin que antes sea requerido el arrendatario y se haga la debida excusión de sus bienes.

Importancia del contrato: Respecto al contrato de arrendamiento, el analista Real Estate de Propiedades, Leonardo González, explica que es un papel relevante porque considera las reglas de uso del inmueble, normativas de mantenimiento y el ajuste inflacionario de precios.

En este último punto, es importante que el fiador y el inquilino revisen que el aumento de la renta sea entre la inflación y un máximo de 10 por ciento.

Requisitos para ser fiador: El sitio de Legal Global Consulting menciona que para ser fiador es importante tener a la mano y actualizados ciertos documentos. Por ejemplo:

Identificación oficial vigente. Fotografía de medio cuerpo reciente. Escrituras del inmueble (libre de gravamen). Último recibo de predial y agua. Solicitud de póliza jurídica llena. Acta de matrimonio (en caso de requerirse).

Antes de firmar revisa lo siguiente: El día de la firma del contrato de arrendamiento, es importante que tú como fiador, el inquilino y el propietario corroboren que el documento mencione lo siguiente:

Qué y quién va rentar la propiedad. Las cláusulas indispensables y adicionales. La descripción del inmueble. La garantía para el cumplimiento de las obligaciones.

Diferencia entre aval y obligado solidario: Cuando de contratos de arrendamiento se trata, además de fiador se suelen emplear los términos: aval u obligado solidario. Sin embargo los expertos de BRRH Abogados aclaran que aval es:

Una figura jurídica de carácter mercantil. Aplica en los títulos de crédito. Lo regula la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito.

Por ello, en estricto sentido, el aval no es aplicable a los contratos de arrendamiento ya que es un contrato de carácter civil.

No obstante, si se llegara a emplear, se refiere a la persona que firma 12 pagarés para garantizar el cumplimiento de las rentas. Además, responderá en un juicio de ejecución de estos documentos, en caso de que el arrendatario incumpla.

Respecto al obligado solidario es la persona que contrae todas las responsabilidades establecidas en el contrato. Esto sin dejar un bien inmueble en garantía.

Como puedes ver, ser fiador es algo de suma importancia y compromiso. Por ello, si te piden el favor, verifica que la persona tenga capacidad económica. También, asesórate con expertos.

A continuación, te compartimos algunas consideraciones de lo que representa ser un aval. Analiza tu situación económica: Si algún familiar o amigo te ha pedido que seas su aval, considera tu situación económica actual. Piensa que, si desafortunadamente, la persona que te solicitó como aval se queda sin trabajo o daña la propiedad y se niega a pagar, serás tú quien tenga que responder.

¿Es posible que alguien me ponga de aval sin que yo me entere? Simplemente no. Tú te conviertes en un aval, siempre y cuando decidas hacerlo, para esto, tendrás que ser notificado formalmente y firmar un contrato en el que aceptes las condiciones.

Mantente informado del status del inquilino: Si ya decidiste que sí serás el aval, legalmente adquieres casi los mismos compromisos que el inquilino. Lo ideal es estar atento de cómo va en sus pagos, es decir, asegúrate de que va al corriente con sus mensualidades, de lo contrario serás tú quien termine pagando.

La confiabilidad de la persona: Uno de los primeros aspectos que debes considerar antes de aceptar ser aval de una persona es: ¿quién es la persona que nos solicita como avales? Más allá de la amistad o parentesco familiar que tengas, investiga – en la medida de lo posible – si tiene un buen historial crediticio o si tiene más deudas que cubrir, como la mensualidad de un auto, entre otros aspectos. Es importante, debido que entre más deudas, tendrá menos capital para pagar la renta.

Beneficios de ser un aval: Básicamente no hay ningún beneficio. La única recompensa será la sentimental, la satisfacción de haber ayudado a un amigo, y bueno, como dice el viejo dicho “Favor con favor se paga”, en algún momento podrías ser tú quien necesite de un aval.

Ahora ya sabes que ser aval de una persona significa comprometerse a pagar una deuda que originalmente no es tuya. Analiza bien la situación.