René Delios
Demasiado caso a la opinión de una organización tan desacreditada como la OEA, hace hasta la presidenta de México, a la que debió haber dejado gritando sola en la loma, y en una de esas, hasta retirarse de ésta, pues en realidad es mero membrete que ha servido de control a las prepotencias del Tío Sam no solo dentro de su territorio, sino también en el continente, durante el periodo negro de dictadores latinoamericanos.
Señalar en ese informe sobre que la elección vía voto popular podría inhibir la independencia del poder judicial en el supuesto que los triunfadores son militantes de Morena, es entrar en criterios no propios de una comisión de observadores electorales, y caer en la intromisión de un punto ya superado incluso vía el legislativo federal, que fue quien aprobó la reforma al poder judicial de la federación, y caer evidentemente en la parcialidad, y dar la razón a una oposición habida de resonancias, y mejor si son internacionales.
Obvio la Secretaría de Relaciones Exteriores como la propia presidenta Claudia Sheinbaum sancionaron la referencia de la comisión de marras, y de plano la mandataria se les fue a la yugular diciendo que la OEA se guarde sus recomendaciones y evite opinar respecto a la forma en que, con apego a la soberanía, el pueblo de México eligió a los nuevos integrantes del Poder Judicial de la Federación, aparte de que los estatutos del propio organismo internacional, le impiden opinar sobre la soberanía de los pueblos y las naciones del hemisferio.
Pero su secretario es parte del conservadurismo duro que crece en América, con presencia en las presidencias de EU, Ecuador, Argentina y El Salvador, naciones que se mantienen calladas ante la ola de operativos de captura de migrantes en EU, tratados en calidad de criminales, y los uniformados van hasta los propios centros de trabajo a dejar sin brazos a campos de cultivo, constructoras, prestadores de bienes y servicios.
No, tampoco sobre el particular se ha pronunciado la OEA.
Matraz
Durante dos días estuvo en la entidad la secretaria de la mujer Citlalli Hernández, acompañando al gobernador, a Huixtán y Chilón, donde estuvieron en la inauguración del primero de 52 Centros Libre del Programa de Atención Integral para el Bienestar de las Mujeres, que comenzarán a operar este año en el estado.
Fue en Chilón, a dónde se llevó a cabo la Asamblea de Mujeres “Voces por la Igualdad y contra las Violencias”, entendido esto que hay varias, desde la psicológica, la económica, la política, entre otras ya tipificadas como tales, en un trabajo que será de mucha ayuda, en especial en las zonas indígenas en las que, sin mentir, hay una excesiva violencia en contra de las mujeres, desde las hijas vendidas, mujeres golpeadas por borrachos prepotentes y cobardes, y la impunidad que permiten muchas autoridades en comunidades y ayuntamientos, para con los agresores.
No, no se trata de una cuestión de paso, sino de un reto, que tanto Citlalli Hernández como Eduardo Ramírez, saben que tienen enfrente, y si Chiapas va a ser una entidad de leyes, hay que entrarle a ese mundo indígena en el que la mujer, no goza de derechos.
Para ayer domingo –suponemos- la funcionaria de Claudia Sheinbaum se quedó su fin de semana en la entidad, y acompañó al mandatario al inicio de la construcción de la autopista Palenque – Ocosingo, “La ruta de las Culturas Mayas”, precisamente a seis meses de que el mandatario tomara posesión del cargo.
Hubo una ceremonia maya y sin más incidentes, pues hay que recordar que esa obra fue consultada a cuatro municipios de la región norte, cuya población participante dio su aval.