Editorial

10/junio/2025

En La Mesilla, entre Frontera Comalapa, Chiapas y Huehuetenango, Guatemala, se reportó una persecución de policías mexicanos contra supuestos criminales; hubo detonaciones de armas de fuego y muertos: cuatro integrantes de un grupo civil armado.

 

Se incautaron cuatro armas largas —una de ellas con lanzagranadas—, dos armas cortas, dos chalecos balísticos, 17 cargadores, una granada percutida calibre 40 y cuatro vehículos, de los cuales tres son blindados.

 

Los cuerpos fueron trasladados al Servicio Médico Forense de Comitán para realizar la necropsia e identificar a las víctimas.

 

Realmente el operativo fue parte de las tareas de investigación desarrolladas tras el homicidio de cinco policías estatales el pasado 2 de junio, en el municipio de Frontera Comalapa, lo que detonó la reacción de las autoridades de Chiapas ¡Con todo! Como ha dicho el mandatario estatal, Eduardo Ramírez.

 

En torno a esto el general Henry David Sánchez Ramos de Guatemala, señaló que los militares de su país, llegaron al lugar de los hechos como producto de un reconocimiento y nada más, cuando ahí están los videos que testifican otra cosa, y motivó el reclamo del mandatario de Chiapas.

 

Y es que se trata de un grupo delictivo que lo mismo siembra zozobra en Frontera Comalapa como en Huehuetenango, lo que hace muy “rentable” por su ubicación, algo que ya no puede continuar, pues luego del enfrentamiento la gente de las poblaciones de la zona desapareció.

 

La Mesilla y poblados aledaños a ambos lados de la frontera, dejaron de tener actividades, y el día de ayer -y probablemente hoy-, se vieron los negocios cerrados.

 

El combate al crimen organizado en la región del estado, está declarado.