Exceso de confianza de usuarios, entrada para estafas, alertan bancos

27/marzo/2025

 

Años atrás, un fraude podía presentarse en cheques o falsificación de firmas, hoy el uso de las tecnologías se pueden traducir en estafas en diversas modalidades, señalan

El exceso de confianza por parte de usuarios se ha vuelto la entrada para que sean víctimas de estafas financieras, alertó HSBC.

De acuerdo con la institución bancaria, el exceso de confianza al utilizar servicios financieros ocurre cuando una persona proporciona información personal o financiera por teléfono, correo electrónico u otro canal tecnológico que no daría a un extraño en la calle.

También sucede cuando olvida configurar su privacidad en redes sociales, permitiendo que desconocidos accedan a su perfil y publicaciones.

De igual forma, una mala práctica ocurre cuando se comparten en redes sociales fechas de cumpleaños, fotos familiares o nombres de mascotas, sin darse cuenta de que esto hace pública esa información, ya que se pueden obtener contraseñas con estos datos.

Otro caso es considerar que los fraudes suceden a otras personas y no a ellos o su familia, o dar por hecho que los adultos mayores de su familia saben cómo cuidarse de un fraude o estafa, digital o físico.

HSBC también destacó que dar clic a ligas o programas que pueden descargar códigos maliciosos que atacan dispositivos con mucha información, como el teléfono celular, también es una señal de exceso de confianza.

El banco indicó que creer que le ofrecen una inversión u oferta con rendimientos irreales por tiempo limitado, o caer en una estafa “romántica” en la que, apelando a sus sentimientos, le solicitarán dinero reiteradamente, son otras situaciones que demuestran esta falta de precaución. Finalmente, conectarse a una red WiFi sin cerciorarse de su autenticidad también es un exceso de confianza.

Además, recordó que ninguna institución financiera llamará a un cliente para pedirle información personal y mucho menos confidencial, argumentando con engaños que es una situación urgente.

En ese sentido, tan pronto se identifique que en una llamada o mensaje se solicita información financiera confidencial, debe cortarse la cadena de comunicación: esto es, evitar dar click a ligas de internet desconocidas y/o colgar; y contactar a los teléfonos o canales oficiales de la institución financiera.

“El sentido común a utilizar debe ser el mismo que se emplearía si un extraño nos requiriera, con argumentos diversos y urgencia, las llaves de nuestra casa”, dijo.

HSBC recordó que años atrás, un fraude podía presentarse en cheques o falsificación de firmas, y que hoy el uso de la ingeniería social y la Inteligencia Artificial se pueden traducir en correos electrónicos que piden dar click en una liga (Phishing), SMS con ligas (Smishing), llamadas telefónicas que usurpan la identidad de una institución para obtener información (Vishing), uso de Códigos QR que llevan a sitios virtuales de alto riesgo (Quishing), o suplantar voces, entre otros./ (EL UNIVERSAL)