Unas horas antes de asumir la presidencia de Estados Unidos, dejó en claro que la prioridad de su mandato será echar a los indocumentados
Sobre advertencia no hay engaño. Unas horas antes de asumir la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump dejó en claro a la multitud que lo ovacionaba que la prioridad de su mandato será echar a los indocumentados.
“Vamos a detener la invasión de nuestras fronteras. Para cuando el sol se ponga mañana por la tarde [lunes] la invasión de nuestras fronteras se habrá detenido, y todos los intrusos fronterizos ilegales que lo hagan de una forma u otra, estarán de vuelta a casa”, aseguró en su “Make America Great Again Victory Rally” (Mitin de la Victoria Hacer Grande a EU de nuevo), el Capital One Arena de Washington, donde encabezó un mitin ante simpatizantes que lo esperaron por horas, que soportaron el frío, con tal de escuchar cómo es que piensa cumplir cada una de sus promesas.
Trump no los defraudó. Arropado por su familia, por su equipo [empezando por Elon Musk, a quien sí dio la palabra, a diferencia del vicepresidente J.D. Vance, quien ya no alcanzó a dar el discurso que tenía previsto], Trump dijo que actuará “con una rapidez y fuerza histórica” para resolver todas y “cada una de las crisis a las que se enfrenta” EU.
“Por fin vamos a construir nuestro país, defender nuestras fronteras y proteger a nuestros ciudadanos, y detendremos la inmigración ilegal de una vez por todas. No nos invadirán. No nos ocuparán. No nos infestarán. No nos conquistarán”, resumió mientras la gente clamaba “¡USA! ¡USA! ¡USA!”.
Envalentonado por la ovación, Trump subrayó que desde hoy, comenzará la “mayor operación de deportación masiva” en la historia de Estados Unidas; “mayor que la emprendida por Dwight Eisenhower, quien con su “Operación Espaldas Mojadas” aseguró haber deportado a unos 1.3 millones de personas.
Trump dijo que las órdenes ejecutivas fronterizas que firmará serán “las más agresivas, las más arrolladoras” que se hayan visto en EU. “Expulsaremos a cada migrante ilegal, a cada criminal que haya en nuestro país”.
El ambiente en la capital estadounidense, donde hoy al mediodía Trump será investido presidente al interior del Capitolio, ante un clima que se prevé helado, era de división. Mientras los trumpistas celebraban por todo lo alto y hacían un conteo regresivo, otros advertían que, a partir de este lunes, el Estados Unidos como se conocía hasta ahora acabará y la democracia estará en peligro.
Adentro del Capitol One, Trump confirmaba que hoy firmará tantas órdenes ejecutivas como pueda —CNN dijo que un centenar; Fox News habló de “más de 200—. Y prometió generar empleo y mantener un EU fuerte y próspero.
Stephen Miller, vicejefe de gabinete de Trump y quien también estuvo en el evento de ayer, definió algunas de las acciones del futuro mandatario en una llamada con republicanos de alto rango del Congreso. Dos fuentes informadas de la llamada dijeron a la cadena estadounidense CNN que Miller confirmó que Trump declarará emergencia nacional en la frontera como forma de desbloquear fondos del Departamento de Defensa para uso de la administración.
También tomará medidas para designar a una serie de cárteles mexicanos de la droga como organizaciones terroristas extranjeras y ordenará a su administración que tome medidas para restablecer su política de Protocolo de Protección de Migrantes del primer mandato, que se conoce más comúnmente como “Quédate en México”.
De acuerdo con Fox News, Trump pondrá fin a la política de “detener y liberar”, estrategia por la que las autoridades liberan en suelo estadounidense a migrantes de tenidos mientras comparecen a sus citas con el juez, y ordenará al ejército construir una nueva fase del muro fronterizo.
Trump también abordó el tema de TikTok, que ayer regresó a Estados Unidos, luego de que el presidente electo dijera que suspendería la prohibición de la plataforma y propusiera que sea controlada en 50% por accionistas de EU.
Con sus planes a la vista, en una capital de EU blindada para su investidura, el escenario está puesto para otros cuatro años de turbulencias, fiel al estilo Trump./ (EL UNIVERSAL)