No regalar animales silvestres en Navidad o Reyes Magos, pide Profepa

16/diciembre/2024

Tras lanzar la campaña “Tu casa no es su casa”, exhorta a la población a no extraer, adquirir, vender, capturar o tener vida silvestre en cautiverio como mascotas

Ante la creciente demanda por adquirir vida silvestre como monos, tarántulas, reptiles, aves y mamíferos exóticos para regalar en fechas decembrinas, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) pidió a los mexicanos no extraer, adquirir, vender, capturar o tener vida silvestre en cautiverio como mascotas.

Así, lanzó la campaña “Tu casa no es su casa”, en la que llamó a evitar la captura, compra, obsequio de ejemplares de vida silvestre para tenerlos como ornato o mascotas.

La dependencia federal informó que el tráfico de especies silvestres incrementa a final de año, en las épocas decembrinas de dar regalos, debido a la alta demanda por tener un animal exótico en casa. Entre las especies más traficadas se encuentran el mono aullador, el mono araña, las tarántulas, los reptiles y aves de presa, loros, pericos y guacamayas.

Al respecto, la Profepa indicó que, extraer fauna y flora silvestre tiene muchísimas implicaciones para el individuo, para su grupo y para su ecosistema pues el tráfico ilegal es una de las principales causas por las que la extinción de animales se ha acelerado.

“Tener un animal o una planta extraído del medio silvestre en casa implica someter a más presión a los ecosistemas. Los ejemplares de vida silvestre enfrentan malas condiciones durante su captura, acopio, traslado y comercialización: este proceso les causa estrés y sufrimiento.

“Aproximadamente el 70 por ciento de los ejemplares mueren durante estas etapas. Otros se deprimen, especialmente aquellos que viven en grupos. Pero además del daño que se hace a los individuos, la captura afecta irremediablemente a las poblaciones de flora y fauna silvestre debido a que predomina la extracción de ejemplares jóvenes, lo que disminuye la tasa de reproducción de toda la especie”, explicó la Procuraduría.

Agregó que las nuevas condiciones en las que vive un animal silvestre al llegar a un encierro no son la adecuadas, ya que son hacinados, no cuentan con las condiciones de higiene adecuadas y la alimentación es deficiente, afectando la calidad de vida de los individuos capturados y aumentando su nivel de mortalidad.

“La tenencia de fauna silvestre sin conocer sus características biológicas conlleva un riesgo para los animales y personas, además de que pueden ser transmisoras de enfermedades zoonóticas.

“Este fin de año la Profepa les invita a decir no al tráfico ilegal de especies: no son mascotas, son animales silvestres. Necesitan espacio, necesitan a sus congéneres, necesitan vivir en comunidad, alimentarse a partir de sus propios procesos sistémicos. Cuídemoslos y cuidémonos”./(EL UNIVERSAL)