René Delios
El despliegue inútil sobre el cómo, López Obrador va a entregarle el país a Sheinbaum, no surtió tampoco efecto.
Tan no resultó que fue corto, de dos días a lo más, en el que aún andan usando a comunicadores de las televisoras a riesgo de su fama, en una forma de etiquetarlos ante el siguiente sexenio como su voz cantante, pues en éste que termina no dieron resultados los de Loret de Mola, Lisa Sánchez, López Dóriga, Denisse Dresser o Ciro Gómez Leyva, que ya no van a salir “a cuadro” pues por seis años fue sabido que ha sido tiro por viaje, y ya en los extremos del morbo, había los que sintonizaban al otro día a la mañanera del presidente, para escuchar de viva voz su contestación, y hasta se llegó a decir que eran en verdad objeto del desprecio del mandatario como profesionistas, por mentirosos, cosa que en otro tiempo te obligaba a un periodista a salir del país.
Ser objeto –político, empresario, y ni se diga un periodista- de la animadversión del presidente de México, era vivir una serie de desgracias que podían costar hasta la vida, pues otrora a los periodistas los mataban los políticos o “un lamentable accidente”, en un pleito de balas cruzadas.
El caso es que se desplegó que la doctora Claudia recibiría una nación endeudada, con rezago social y humanos, describiendo que –en datos publicados por el diario español El País- las personas en situación de pobreza siguen siendo alta —46,8 millones de mexicanos-, pues representa el 36,3% de la población total que es de 130 millones, y todavía lo desglosan por estados y para no variar –desde añales ha-, Chiapas aparece como la entidad más pobre del país, con casi 70 por ciento de sus habitantes en esta condición, seguido de Guerrero con el 60,4%;, Oaxaca con el 58,4%, y Puebla, con el 54%.
Así que la cosa y causa chiapaneca no está fácil, y menos si a la próxima administración no la acuerpan todos los sectores –a los que se les debe garantizar seguridad en la inversión, y tranquilidad pública-, pues de lo que se trata es de lograr que mínimo, se coloque a la entidad dentro de la media nacional, lo que representaría o más bien colocaría, al gobierno de Eduardo Ramírez Aguilar, como el mejor en la historia de la entidad.
Entidad que llegó ya a dos siglos de ¿anexión o federación? a México, por lo que se dio una emotiva ceremonia en Palenque, a la que llegó el presidente y estuvo acompañado por los gobernadores constitucional y electo, y en dónde vivirá su retiro en su finca “La Chingada”, y solo porque las están cerca las ruinas monumentales de la icónica ciudad maya, que dan nombre al municipio, no le adjudicaron la megalomanía que la terminal del tren maya en esa localidad, era solo porque ahí vivirá el santón de la 4T, al que le dieron con todo en el sexenio: inventaron, ironizaron, con inquina, dolo, baja estofa, en fin, sin que hasta la fecha le hayan hecho mella.
Digo, lo contrario se viera, y eso no lo celebran ni el PRD –que ya se fue-, el PRI –que para allá va- o el PAN –que se desinfla desde dentro-, aparte del MC, que es a mi juicio el partido de oposición que más creció de manera proporcional en las pasadas elecciones, y que puede ser la siguiente opción de oposición en México, salvo traten de pulverizarlo al viejo estilo priista en que, si un partido iba creciendo, le sacaban otro de la manga al que le daban su registro, y a competir so pretexto de que en la nación, se respeta la pluralidad, como uno de los baluartes de la democracia, cuyo día mundial se conmemoró el pasado 15 de septiembre, en que a escala mundial se conmemora el Día Internacional de la Democracia, sistema visto como la mejor oportunidad para reforzar la defensa de la libertad de expresión, las libertades civiles y el Estado de derecho, asegurando que las instituciones rindan cuentas al pueblo además de proteger y promover los derechos humanos.
Sí, eso de la democracia suena a ensueño, y más en un país violentado como el nuestro, incluyendo al estado que no estaba acostumbrado a esa situación de barbarie.
El punto es que en 2024, en cincuenta países -que representan la mitad de la población mundial-, celebró, celebra o celebrará algún tipo de elecciones, claro que a nombre de esto, desde la sede que la ONU tiene en Suiza, se pasó a traer a gobiernos impositivos del bloque comunista o socialista, pero no se hizo mención alguna de México, pese a que recién una comisión de leguleyos se apersonaron a la oficina de Antonio Guterres, el secretario general de esa asamblea internacional, que por estas fechas anda por Suiza –me dicen- en una reunión del consejo general para hablar alarmados de que los derechos y valores humanos están siendo atacados en todo el mundo, socavando libertades, marginando, reduciendo, censurando los espacios cívicos, intensificando la polarización, lo que genera la desconfianza.
Y la lindeza es que, no solo sucede en los países no democráticos, sino que también en el “mundo libre” –que son los más- en los que se manipula la verdad, se desprestigia el pensamiento diferente, el concepto libertario, “fuera de contexto”, citando uno ya conocido por los mexicanos, y tema central de éste bodrio: “Primero los pobres”.
Esa frase fue el origen de todo el despliegue en contra del sexenio de AMLO, por populista, comunista, despilfarrador y, curiosamente, la nación lo apoyó a tal respuesta que casi borra a sus adversarios, demostrando lo siempre dicho: en la oposición tiene tiempo que son muy pocos, pero son los dueños de todo: medios de comunicación, empresas, industrias, concesiones, fideicomisos, evasiones fiscales, sindicatos, organizaciones, y con todo ese bloff inflaron cifras, estadísticas -llegaron a publicar que Xóchitl Gálvez iba arriba en las encuestas-, en tantos y cuántos, en fin, lo sabido por el cual, al dejar de ser “apachados”, aparte de ser desinflados, se sintieron como despojados y es por eso que, con la última inquina trataron de “manchar” lo reluciente de ésta administración –les guste o no-, y que fue incluso reconocido por el banco mundial, cuando certificó que la pobreza bajo en México durante el sexenio, destacando también en ese promedio a nuestra entidad, lo cual es bueno, muy bueno, pues es referencia que observan los verificadores de esa calificadora de crédito, que informa a escala mundial que por primera vez en lo que va del siglo, Chiapas registró una mejoría en su desarrollo humano, y eso que parece poco para las oligarquías ofendidas, es bastante para los que habían padecido la miseria ancestral, por los olvidos multitudinarios de su gobierno.