Arít León Rodríguez
Que se necesitara para que por una vez, en México se decidan a aplicar castigos más duros a los pedófilos que posean o distribuyan material que contenga prácticas especialmente vejatorias para los menores o en las que se emplee la violencia.
Las consecuencias del abuso sexual y la explotación sexual comercial infantil implican un grave deterioro en el desarrollo físico, mental, social y emocional de los menores. Sienten dolor, vergüenza y culpa, ingresan a una desvalorización de sí mismos y piensan que ya no pueden cambiar su situación, aparte, desprotección.
La humillación y el rechazo son la norma cuando ya son mayores, dejan de ir a la escuela y al abandonarla ocasionan una cadena de problemas en su vida futura. En casos extremos pueden llegar al intento de suicidio o a refugiarse en las drogas y el alcohol.
Son personas que se desarrollan con desconfianza e insensibilidad ante la sociedad, que ven alteradas sus capacidades de concentración, lenguaje, creatividad y memoria, que no se proyectan hacia el futuro y que pierden toda ilusión de iniciar un proyecto personal, además de que notan que su agresor no sufre las consecuencia de sus delitos.
¿Cuántos agresores hoy son victimas de ayer? Un sistema enfocado en “reformar” al delincuente y dejar a la victima a la deriva.
Hoy nos hallamos con casos terroríficos como el que enfrentan en el Hospital de la Niñez Oaxaqueña donde se enfrenta el caso más grave de agresión sexual a una menor.
Se trata de una bebé de un año ocho meses de edad que fue violada el 30 de abril en la comunidad de Chilixtlahuaca del municipio de Huajuapan de León, Oaxaca.
La niña fue abusada al punto de dejarla al borde de la muerte a sus 20 meses de edad, casi desangrada, lesionada hasta un nivel inimaginable al punto que las medicas y médicos que le han atendido han necesitado tratamiento psicológico de contención.
¿Para que el violador reciba 10 años de prisión y salga con media pena cumplida por buen comportamiento?
Por cierto, el abusador de esta pequeña, esta libre. El no esta relacionado con la niña consanguíneamente, si no que su pareja es la tía de la niña, ya que su madre no pudo cuidar de ella por problemas mentales. La custodia fue solicitada por su tío y le fue negada por ser homosexual.