Terminaron las campañas proselitistas, y queda el periodo de reflexión para que los electores razonen su voto de acuerdo a las propuestas que consideren mejor, en la idea de que habrá entidades en que se contará con seis boletas, como es el caso de Chiapas, entidad en la que se pondrá especial atención en algunos municipios conflictivos.
El día 28 en San Cristóbal de las Casas el candidato de Morena a gobernador Eduardo Ramírez Aguilar cerró campaña, ayer lo hizo en el zócalo de la CDMX, Claudia Sheinbaum Pardo, ante una importante concentración de personas que, como se ha dicho, son baños de pueblo que no garantizan votos, pero se trata de marketing.
Mientras los seguidores de Andrés Manuel López Obrador y sus contrarios más acérrimos, mantienen una disputa constante en todos los medios y redes sociales, y los que en verdad viven la realidad mexicana parecen estar excluidos de los temas, que se suscriben a acusaciones sin bases, descalificativos y hasta insultos.
El México de López Obrador va por buen camino según afirma, pues según esto la transparencia y la rendición de cuentas como la información se esclarecen a diario, aun los menos favorecidos sigan siendo una asignatura pendiente en esta tendencia de acusaciones y rectificaciones ex profeso.
Con sus diferencias hoy, las referencias de ayer las merecía Peña Nieto, quien decía que “lo bueno no se cuenta, pero cuenta mucho”, con relación al cómo minimizaban sus logros de gobierno al final de su sexenio; las acusaciones también le caían como ahora a AMLO vía las redes sociales.
La diferencia es que mientras AMLO cuenta con mucho apoyo, Peña hasta perdió la presidencia, gubernaturas y el Legislativo federal.
Así que las comparaciones del fin de éste sexenio con el anterior ni al caso.
Así que la gente que planea votar tendrá tres días para razonar su voto.
