Agencias
Los segmentos de ingresos medios de la población fueron afectados de tal forma por la pandemia, que fueron a engrosar las filas de la pobreza.
Rodolfo de la Torre, director especialista en Desarrollo Social con Equidad del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), explicó que, usando los datos del INEGI y el Coneval, calcularon que el año pasado la pobreza laboral se nutrió de personas que antes estaban en las clases medias, ya que el 42.3% de las personas de los segmentos medios de ingreso laboral, o 13 millones de personas, cayó en condición de pobreza laboral.
El especialista explicó que esto obedeció a que la afectación de la pandemia al mercado laboral fue mayor que la del PIB, debido a que impactó en zonas urbanas donde el ingreso preponderante es el laboral, además de la ausencia de redes de protección.
De la Torre añadió que la reciente medición del Banco Mundial sobre clase media también dio cuenta de la afectación que tuvo en la pandemia, ya que usando una definición de un hogar de cuatro personas con un ingreso entre 30 y 170 mil pesos al mes, el organismo calculó que este segmento pasó de representar 30.6% de la población en 2019 a 27.5% en 2020, mientras que los hogares clasificados como pobres (familia de cuatro personas con ingreso mensual de 13 mil pesos o menos) aumentó de 20.7 a 24.9% en el mismo lapso.
Según datos del Coneval, el ingreso laboral promedio por persona de los segmentos intermedios de la población pasó de 1,513 a 1,398.98 pesos mensuales durante el primer año de la pandemia, lo que implicó una reducción de 8.4% en términos reales.
Así, este grupo población tuvo una reducción de ingresos laborales superior al segmento más alto, que fue de 1.5% real. Al dividir los estratos de ingresos en cinco, el segmento medio bajo tuvo una reducción de 11.5% real, el medio de 8.2%, y el medio alto de 5.6% real, según el Coneval.