El adeudo data de un aproximado de 10 años, y el monto total porque el que se aseguró el inmueble es por 750 mil pesos
La mañana de este viernes, corporaciones policiacas de los tres órdenes de gobierno brindaron seguridad para que se llevara a cabo un desalojo de un bien inmueble ubicado en carretera Sayula, de esta ciudad.
Antes de las 9 horas, el licenciado Carlos Jiménez (abogado particular de Tuxtla Gutiérrez) dijo que la visita que realizó a Cintalapa fue para cumplimentar una orden judicial (lanzamiento), que se seguía desde el 2014, y la resolución final del juez fue desalojar a las personas que vivan de manera indebida dentro del inmueble ubicado en la zona referida.
“Este inmueble pasa a pertenecer a una empresa cintalapaneca denominada “Distribuidora Calli”, dedicada a la venta de materia para la construcción, y precisamente fue eso, mercancía lo que se le dio al demandado y no pagó” dijo el entrevistado.
Comentó el abogado que la deuda data de un aproximado de 10 años, y el monto total porque el que se aseguraba el inmueble era por 750 mil pesos, y aunque el que era el dueño tuvo la oportunidad de presentar su avalúo y peritajes, siempre hubo omisión de su parte y nunca contestó la demanda, y al final, perdió lo que era suyo.
Sostuvo que desde hace más de un año a la persona que era propietario de este lugar se le pidió que de manera voluntaria se saliera y nunca lo hizo, por eso se tuvo que recurrir a la fuerza pública, dijo Carlos Jiménez.
Por ultimo dijo el licenciado que toda persona que contraiga deudas tiene que pagarlas a como dé lugar para no verse después envuelto en líos de desalojo como sucedió este viernes.
Mencionar que por varias horas, grúas sacaron más de una decena de vehículos que estaban dentro del inmueble, fueron llevados a diversos lugares y hasta una familia que ahí vivía, fue sacada de la casa, ya que el nuevo dueño no quería a nadie adentro de su propiedad.
Hubo presencia de integrantes de alguna organización, pero al saber de qué se trataba el asunto se retiraron del lugar, sabiendo que era un tema entre dos personas y por deudas añejas.
Al final, el portón fue asegurado con cadenas y candados nuevos./ Marcos Ramos-Cintalapa
