Connacionales internos en el Centro de Detención Migratoria del Condado de Baker reciben visita de trabajo del Cónsul Juan Sabines Guerrero
Al Centro de Detención del Condado de Baker llegan alrededor de 12 mexicanos en promedio cada mes, en espera de presentarse ante un juez y poder determinar su deportación o si tienen alguna oportunidad de salir y continuar la vida en los Estados Unidos, al que llegaron sin documentos, algunos con días de haber pisado este suelo, otros con 10 o más años viviendo, trabajando, siendo parte de la comunidad.
Hace unos días, los mexicanos detenidos en Baker recibieron la visita del Cónsul de México en Orlando, Juan Sabines, para conocer de primera mano su situación, dar seguimiento al trabajo del Departamento de Protección del Consulado, que visita frecuentemente este sitio, y proveerles, en caso de que así lo requieran y no cuenten con los recursos, de ayuda jurídica, gracias a las alianzas del Consulado con diferentes firmas de abogados en el Centro y Norte de Florida.
Acompañado de Alberto Gutiérrez y Pedro Rodríguez, parte del equipo del Consulado, el Cónsul de México pasó horas escuchando uno a uno a los 12 mexicanos que accedieron a esta entrevista y a la única mujer detenida en este Centro.
Desde la entrada de este Centro hay frío, al igual que en los pasillos, acompañados por los ecos de cada sección en este complejo, donde no hay luz solar, ni aire natural. Es un lugar limpio sin duda, pero gris y llano, el ambiente de una bodega o de un hospital que pareciera vacío.
Las autoridades permitieron la visita extraordinaria del equipo del Consulado, y dieron las facilidades para que en un improvisado lugar de reuniones (que sirve como dormitorios) se recibiera a dos grupos de seis hombres, todos con historias distintas, con el ánimo apagado por la situación que viven, pero que sintieron en esta visita el interés de su país, a través del equipo del Consulado.
“Que bueno que vienen”, sostuvo Roberto, quien continúo “aquí vivimos la difícil situación del encierro, de la comida, del frío, pero sobre todo de la incertidumbre, y que ustedes vengan a vernos nos ayuda, nos da un poco de esperanza”. Cuenta como fue detenido por manejar sin licencia, y posteriormente, al no contar con documentos, ICE lo trajo a este centro.
Por lo menos la mitad de los 12 hombres entrevistados repiten la historia: detenidos por no tener licencia, alguno con Driving under the influence (DUI) o Driving While Intoxicated (DWI), ya que el aliento alcohólico es suficiente para ser detenido. Ricardo cuenta que fue detenido junto con su esposa por una llamada anónima luego de una discusión en casa, y aunque no hubo violencia, el ruido provocó la denuncia, y luego la llegada del Sheriff.
La pareja desinformada sobre el derecho de no abrir la puerta a un representante de la autoridad que no lleve una orden, los llevó a una detención por una falta menor, y un día después por los agentes de ICE, y desde hace meses están separados, dando la lucha legal que les permita retomar más de una década de vida en Estados Unidos.
Al momento de la visita hay sólo una mujer mexicana en Baker, lleva dos años, porque la asesoría legal no fue la adecuada. A pesar de haber sido víctima de trata de personas, haber ayudado al FBI a la detención de la banda que la mantuvo cautiva y en explotación, y ayudar a liberar a otras víctimas, un DUI la llevó a la Corte, luego a la cárcel, y finalmente a este Centro en Baker.
La mala asesoría legal, la hizo luchar por una VISA U, cuando tiene todo a su favor para una VISA T, que es el tipo de VISA para las víctimas de trata de personas. Actualmente el Consulado de México en Orlando ha puesto a una de las mejores abogadas de migración del Estado de Florida a atender el caso.
Reunión con los directivos del Centro Baker
El Cónsul Juan Sabines, luego de escuchar a cada connacional que firmó para aceptar la plática con el equipo del Consulado, solicitó una reunión con los directivos del Centro de Detención Migratoria de Baker, la cual fue agendada para unos días después de la visita.
En las oficinas de ICE de la Ciudad de Jacksonville, el Cónsul Sabines, y equipo del Consulado fueron recibidos por los supervisores Cardell Smith y Manuel Vega de ICE-DHS, quienes mostraron apertura acerca de las peticiones de los mexicanos internos en el Centro de Detención Migratoria de Baker, relacionadas con el acceso a la salud y a contar con mejor asesoría del Consulado para conocer sus opciones en cuanto a su estatus migratorio.
El Cónsul Juan Sabines propuso un mecanismo formal y permanente para brindar asistencia legal y médica a los mexicanos en ese Centro, lo que fue aceptado por estos funcionarios federales de migración, con quienes se mantiene comunicación constante.
Desde ahora, en días determinados cada semana, los abogados que trabajan con el Consulado de México acudirán a las instalaciones del Centro Baker, donde con anticipación se anunciará en flyers informativos y por medio de los agentes sobre este beneficio a los internos mexicanos, a fin de conocer cada caso, aplicar un diagnóstico migratorio, logrando no sólo ayudar en aquellos que tengan posibilidad de un alivio migratorio, sino evitar que sean engañados o defraudados por personas que les den falsas esperanzas de arreglar el estatus.
Estas visitas serán acompañadas por personal del Consulado de México en Orlando a fin de conocer el estado de salud, y las necesidades de los connacionales en este Centro de Detención Migratoria. Cabe señalar que este Centro está situado en el Condado de Baker, a 200 millas de la sede Consular.