Uno de los trabajadores se debate entre la vida y la muerte en un hospital del vecino estado de Tabasco
Blanca Rodríguez
Reforma
Ataque de líderes sindicales deja una persona baleada y dos heridos por arma blanca en las inmediaciones del complejo de Gas Cactus.
Los agresores fueron identificados como Armando Bolaina Ramos ex regidor del ayuntamiento de Reforma y actual delegado sindical de la CTM que lidera Juan Carillo Hernández además de otro sujeto de nombre Manuel Mondragón (a) el Ñenga con domicilio en la Ranchería San Miguel 2da sección de este municipio.
La agresión se produjo la mañana de este jueves en la entrada del complejo procesador de Gas Cactus, sitio donde todas las mañanas se concentran decenas de obreros para pedir espacios de trabajo en las compañías que laboran en el interior del complejo de petróleos mexicanos.
Según relató ante las autoridades un testigo y familiar de los heridos que viven en la comunidad de la Ceiba de esta localidad, fue el ex regidor Armando Bolaina y su acompañante Manuel Mondragón “el Ñenga” quienes llegaron armados con una pistola al parecer calibre 22 mm y machetes, y luego se le fueron encima a Vicente Ramos Álvaro a quien le dispararon en repetidas ocasiones mismo que cayó al suelo herido de muerte, mientras que a Roberto Custodio Jiménez lo golpeaban de manera salvaje, fracturándole un brazo.
Una vez que consumaron su ataque las dos personas salieron huyendo del lugar y enfilaron con rumbo desconocido.
Minutos más tarde arribaron elementos de seguridad pública del estado así como personal de emergencias quienes trasladaron a los heridos al centro de salud Valentín Gómez Farías, pero debido a la gravedad de las heridas por proyectil de arma de fuego que presentaba Vicente Ramos Álvaro, este fue enviado a un hospital del vecino estado de tabasco, donde su estado de salud se reporta como grave.
Sobre este hecho las autoridades presumen que fue un pleito personal dado que presuntamente Vicente Custodio abusó sexualmente de la hija del Ñenga y como en el ministerio público no obtuvo apoyo, este decidió tomar la justicia en sus manos tratando de asesinar al abusador.
Otra versión apunta que se trató de rencillas sindicales por las plazas de trabajo en el complejo de Gas Cactus.