Tubo de ensayo

25/enero/2020

René Delios

 

El gobierno de México presentó lo que llamó el cronograma de las licitaciones para definir a las empresas que construirán dos ramales del Tren Maya, fechando el 17 de abril próximo para dar a conocer cuáles fueron las elegidas.

En medio de una serie de controversias, que incluyen la negativa del EZLN, organismos ecologistas, incluso la oposición política, pues el Tren Maya, hasta el momento el proyecto de infraestructura más ambicioso del sexenio, iniciará éste año según se anunció.

Para todos, la obra está definida como la clave del sexenio, pero es a la vez una inversión de entre 120 y 150 mil millones de pesos que incluye iniciativa privada; una cifra que tendría más de seis sexenios que no se invertía en ésta región del país.

Pero éste proyecto podría crecer, si es que los gobiernos de Belice y Guatemala le entran.

De acuerdo a esto, se vislumbra la percepción internacional con ramales para esos países vecinos, con desviación en Calakmul, Campeche, y empatar con el proyecto del Tren Rápido guatemalteco, con rumbo a Tikal.

Por otro lado Belice podría ser la otra nación posible, por su frontera con México.

Pero se trata de proyectos, menciones aun no oficiales, que requieren inversiones serías, no solo gubernamentales sino privadas, pues también se carece de una conectividad aérea regional entre los estados de ésta parte del país con las naciones vecinas, aparte de que las carreteras hacia la mayoría de las zonas arqueológicas más famosas en dichos países no están en buen estado, en un asunto que ha impedido explotar turísticamente el llamado Mundo Maya y crear un producto turístico multinacional, como llaman a estos recursos sean arqueológicos, coloniales o bióticos los que se dedican al ramo turístico.

El Tren Maya tendrá quince estaciones que estarán en Palenque en Chiapas; Balancán en Tabasco; Calakmul, Cd. de Campeche, Escárcega en Campeche; Valladolid, Mérida, Izamal, Chichen Itzá en Yucatán; Bacalar, F.C. Puerto, Tulum, Playa del Carmen, Puerto Morelos, Cancún en Quintana Roo.

La preocupación radica en las zonas protegidas que son Parque Nacional Palenque, Chiapas; Área de Protección Cañón del Usumacinta, Tabasco; Reserva de la Biósfera de Calakmul, Campeche; Reserva de la Biósfera Los Petenes, Campeche; Área de Protección Yum Balam, Quintana Roo; Área de Protección Manglares de Nichupté, Quintana Roo; Reserva de la Biosfera Sian Ka’an, Quintana Roo y Área de Protección Uaymil, también en Quintana Roo.

Pero se ha descartado todo daño ambiental y se aseguró que se impedirá toda mancha urbana alrededor de éstas estaciones que se supone estarán dentro de reservas naturales o cercanas a las ruinas arqueológicas.

Pero la vía férrea no solo tendrá un fin turístico, sino también de carga, para la movilización de productos regionales de todo tipo y equipos a precios más bajos.

Uno de los opositores al proyecto es el EZLN, grupo que emitió un comunicado señalando que “El mal Gobierno Federal simula consultar a los pueblos, suplanta nuestra voluntad colectiva ignorando y ofendiendo nuestras formas de organización y toma de decisiones, como es el vulgar engaño a lo que llamó ‘Consulta’, cuyo objetivo no es otro que imponer por la fuerza el mal llamado Tren Maya, que entrega los territorios indígenas al gran capital industrial y turístico”.

Sobre el particular el mandatario mexicano a mediados de noviembre pasado, planteó que su gobierno ‘no ve a los zapatistas como adversarios’, por lo que reiteró su disposición para dialogar con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional. Incluso López Obrador expuso que los zapatistas “no tienen la información completa”, refiriéndose a que para los zapatistas el Tren Maya pasaría sobre una región arbolada de Chiapas, por lo que el mandatario precisó que el proyecto se aplicará por donde ya hay vía desde hace 70 años y no se tendrían que “tumbar árboles”.

De hecho el ramal pasará por cuarenta municipios de los estados involucrados

El anunció de las licitaciones se dio el pasado viernes, y se esperaban reacciones, pero éstas no se dieron, menos cuando los gobiernos de las entidades involucradas han dado su visto bueno al proyecto que generará miles de empleos durante su construcción y se espera que sea un éxito turístico bajo la premisa de que no hay en realidad nada antes que éste proyecto para generar “un producto turístico” que podrían ampliarse en algunos años a multinacional, si es cierto la versión de que se invitó a los países en dónde se asentó esta cultura admirada en todo el mundo.