Tubo de ensayo

22/agosto/2018

 

René Delios

 

E insisto: hasta que no se registre una desgracia por exceso de velocidad van a reaccionar esos compas de tránsitos municipales, estatales, y en comunicaciones, una verdadera cueva de intereses entre cruzados, en un marasmo que apesta, entre otras lindezas de dependencias en las que debe de llegar personalmente Rutilio Escandón a hacer asepsia.

 

Neto.

 

¿Cómo es posible que aun existan unidades piratas dando servicio público aun las denuncias de referencia?

 

De por sí que en pasados sexenios saturaron de concesiones la entidad en un negociazo de altos funcionarios del ramo con los llamados pulpos del autotransporte, que aparte de ello quieren ser desde regidores hasta diputados, pasando por alcaldes y ¿por qué no? la secretaría del ramo.

 

¡Es corrupción!

 

Esa dependencia ¡apesta!

 

La secretaría de comunicaciones y transportes tiene verificadores que al parecer no funcionan o más bien, no quieren funcionar o son miopes o algo, pero el caso es que el pirataje abunda a riesgo de los usuarios y ni cómo negarlo.

 

Es como los antros clandestinos: desde luego que desde verificaciones y clausuras del municipio que se trate, saben dónde están, pero es varo también clandestino para sus bolsitas pue.

 

Eso es corrupción y está pasando.

 

Son los que abren sin problema alguno en los días de “Ley Seca”, y si los consumidores saben dónde están –obvio las cerveceras que les venden el producto a domicilio-, evidentemente también la autoridad.

 

Si los verdaderos concesionarios detectan al pirataje ¿cómo es posible que la autoridad respectiva no lo haga?

 

Neta que insultan la inteligencia.

 

Así pasa con los males: negaron la chikungunya en toda la costa del pacífico, y resulta que ha habido defunciones con esa enfermedad “que no es mortal”, desde Michoacán hasta Chiapas, siendo Guerrero un caso lamentable de niños saturados con paracetamol, por parte de padres carentes de información médica, y que actuaron a la autoreceta.

 

Así, nos podemos seguir con eso que enarboló el PVEM sobre el no las cuotas voluntarias en los centros escolares, y resulta que ya siendo gobierno en Chiapas, en todas –la que vea en la capital del estado, por ejemplo- por acuerdo de los padres de familia según esto, no de los directivos del plantel –conste-, se están cobrando esas cuotas ilegales, bajo el argumento de que los planteles demandan recursos para su manutención, pues no hay ni para el trapeador.

 

¿Y el presupuesto estatal para el mantenimiento en la educación básica?

 

Corrupción o negligencia, conveniencia o indiferencia, el caso es que por dónde se vea, los efectos adversos los padece la sociedad.

 

Viajar en un taxi ilegal sin garantías de seguridad de nada para el usuario, no es para aplaudirle a la secretaría del ramo que para eso está. El clandestinaje del trago dónde prolifera la prostitución, pues tampoco.

 

En cuanto a las cuotas escolares está fácil: que cada secretario de educación en cada entidad anuncie ante su pueblo que la cuota no es obligatoria y que todo niño y niña debe ser inscrito y sino, pues que acuda a la autoridad correspondiente por violación al tercero constitucional.

 

¡Ha! y creo que ese tema también merece debate en lo que será la consulta nacional sobre la reforma educativa que, para éste escribidor de bodrios debe tener solo un resultado: mejor calidad en educación básica, tanto por parte del gobierno federal y los gobiernos estatales, como del magisterio; en ambos casos y cada cual por su lado, su servicio es mediocre.