Ser colectivero no es un trabajo fácil: choferes

17/diciembre/2014

colectiveroTrabajamos toda la semana de 5 de la mañana a 10 de la noche para lograr un salario de 200 a 300 pesos diarios

Patrón nos pide 650 pesos diarios y de 450 a 500 pesos los fines de semana. A parte el tanque lleno de gasolina

Para evitar carreras, se debe reducir la cuenta o darnos un salario, independientemente de lo que generemos durante el día

Antonio Chávez

Tuxtla Gutiérrez

“No vaya a poner en el ‘reportaje’ que somos medio totorecos para manejar, ni cosas de esas, porque me voy con otro ‘periodista’”. Es la voz de uno de los trabajadores del volante que mientras ríe tras lo dicho, se sienta en una silla a la sombra de la base de los colectivos del fraccionamiento Jardines del Grijalva. Dice que cuenta con 28 años de edad y está dispuesto, como los otros cuatro transportistas reunidos, a conceder la entrevista.

-¿Desde cuándo trabajas frente al volante? ¿Te gusta tu chamba?

-Poquito, unos dos años o tres. Sí, conoces a buenos camaradas y de vez en cuando subes a una que otra morra chula.

-¿Qué le dices a las morras? ¿Platicas con ellas?

-Si se suben adelante y estoy escuchando música, les pregunto si les gusta lo que escucho, o si lo apago mi radio o qué música quieren. Unas nomás se ríen, otras son serias y me dicen que está bien lo que ando.

-¿Qué música escuchas? ¿Trabajando conseguiste novia?

-De todo la música… ‘¡Neee!’, ni tengo novia -sus compañeros sueltan las carcajadas-, pero a algunas las espero en la base de Tuxtla hasta que salgan de la escuela. Les aparto un su lugar adelante, para que vayamos platicando en el camino.

-¿Y si se sube otra persona adelante?

-No se sube. Le pongo seguro a mi puerta. Si no llegan mis amigas, y se llenó atrás, ya se lo quito.

Son las 10.30 de la mañana y uno de los cinco colectivos empieza a llenarse. Es el turno del chafirete sin novia, quien va por la segunda vuelta de seis que realizará en todo el día.

Otro trabajador del volante, un sujeto que lleva cuatro años de casado y es padre de gemelos de cuatro meses de edad, está interesado en responder.

-¿Te gusta tu trabajo?

-No es que me guste, pero tiene sus ventajas. Uno se queda con la unidad, eso está bien…  y si alguno de mis niños se enferma, puedo rápidamente llevarlo al doctor.

-¿Cuál es el pasajero que te cae mal?

-Pues mal, mal, no, ninguno… pero algunos se molestan si vas rápido, otros que si vas penco. No puedes complacer a todos.

-¿Y cuál es la prisa?

-El patrón me pide 650 pesos diarios, y ya con la cuenta tengo que sacar lo mío. Son 650 de lunes a viernes para mi patrón, y los fines de semana le entrego de 450 a 500 pesos. Yo gano por día 200 o 300 pesos. Trabajo diario, de 5 de la mañana a 10 de la noche. A parte, hay que tener el tanque con gasolina.

-¿Por qué el transportista tiene mala fama?

-La gente no entiende que trabajamos bajo presión. Las calles en Tuxtla, y acá también, están hechas un asco. Tienes que estar zigzagueando los baches y a ello súmale que debes sacar la cuenta. Esto no es un trabajo fácil. A parte, la concesionaria ya puso cuatro combis allá arriba (se refiere a los vehículos públicos cercanos a la tienda Aurrerá de la colonia), también con ellos tenemos que competir, en lugar de que nos junten a todos.

Uno de los transportistas, quien hasta el momento no había soltado palabra alguna, arremete: “Para solucionar esto, lo que necesitamos es que el patrón reduzca la cuenta o que nos marquen un salario fijo semanal o nos paguen 300 pesos diarios, independientemente del dinero que hayamos generado en el transcurso del día, y así no estaríamos carrereando”.

-¿Sería la solución, ser asalariados? -pregunta el reportero.

-Con ello evitaríamos muchos choques. Ninguno de nosotros ha chocado. Existen patrones conscientes. Hay unos compas que manejan en la ruta 108 (dicen, es la que lleva de La Misión a Los Pájaros, baja a la Novena Sur y continúa sobre la Avenida Central hasta el 5 de Mayo), a ellos se les paga un salario. Con una barra contadora, como el Conejobús, se va marcando el pasaje que sube y los choferes tienen un salario fijo.

-Pero, los conductores de Conejobús generan varios accidentes, ¿no?

-Porque son pen… , no todos… La vida sería más sencilla para todos si nos dieran un sueldo fijo.

La entrevista concluye, y mientras se despide el reportero, uno de los trabajadores del volante le pide hacer una nota sobre la gran cantidad de baches que existen en la colonia