A machetazos, mató a su mamá y su hermanita

17/marzo/2018

 

El desalmado sujeto, Jeremías “N”, de quien se rumora sufre de sus facultades mentales fue puesto a disposición del ministerio público para que esa instancia proceda en consecuencia

La mañana de este jueves, a las diversas corporaciones les informaron que en un muy lejano ejido llamado Amatán, perteneciente a esta comuna ubicado entre la zona limítrofe de Chiapas y Oaxaca había dos personas sin vida, por lo que el agente municipal de ese lugar pedía que las autoridades competentes se dirigieran al sitio a encargarse de lo ocurrido.

El ministerio público, perito, agentes de la policía especializada, estatal preventiva y municipal, se trasladaron al punto arribando hasta las 22 horas, al estar en el lugar, observaron dos cuerpos tirados en el patio de una casa entre un charco de sangre, respondían a los nombres de Débora Hernández Pérez de 35 años de edad y Liliana “N” de 3 años, (madre y hermana del homicida) ambas tenían múltiples heridas provocadas por arma blanca (machete).

Al dialogar los uniformados con los habitantes del lugar, estos dijeron que el autor material de este sangriento crimen había sido Jeremías “N”, de 19 años de edad, por lo que se dispusieron a buscarlo hasta que lo encontraron, y lo detuvieron.

Y fue hasta casi las diez de la mañana de este viernes que las corporaciones regresaron a la cabecera municipal, trayendo consigo al presunto homicida, ya que por tratarse de una comunidad indígena, por usos y costumbres no permitieron que los cuerpos fueran trasladados al servicio médico forense.

Se supo que el detenido, de quien se rumora sufre de sus facultades mentales, sería puesto a disposición del fiscal del ministerio público como probable responsable del delito de homicidio calificado, para que esa instancia pudiera proceder en consecuencia.

Mencionar que la autoridad competente antes de que le finque responsabilidades al detenido, tendrá que solicitar exámenes toxicológico, psicológico y psiquiátrico que ayuden a determinar si realmente el presunto homicida sufre de sus facultades mentales y de ser así, el delito sería inimputable y la persona tendría que ser internado en un centro psiquiátrico./ Marcos Ramos-Cintalapa